Por su parte, José Mourinho se quedó con un lateral inalterado desde la ida. A pesar del dominio del Leverkusen durante los 98 minutos completos, los fuertes esfuerzos defensivos de la Roma demostraron ser una receta para el éxito. Un empate 0-0 (1-0 global) fue suficiente para enviar al club italiano a la final.
La ausencia por lesión del ganador de la EURO2020, Spinazzola, fue un duro golpe para el equipo de Roma. Si bien el rendimiento ofensivo del Leverkusen decayó, Azmoun y Demirbay lograron poner más ataques en la garganta del ocupado portero portugués. Estuvo parejo al descanso, aunque el «Die Werkself» tuvo un 73% de posesión y los visitantes se vieron superados por 13 para conseguir un remate a puerta.
Mourinho optó por retirar a Belotti por el Wijnaldum tras la reanudación de la segunda parte. Roma jugó un poco más a la defensiva por defecto, con Pellegrini ligeramente por delante para apoyar a Abraham. A pesar de no poder presionar a Rui Patricio en sus intentos anteriores, Demirbay sacó lo mejor del portero de la Roma después de la hora. El disparo aplastante del centrocampista parecía destinado al ángulo inferior derecho, pero salvó el balón con precisión.
A medida que se acercaban los últimos 15 minutos, parecía que el Leverkusen no sería capaz de igualar. El tiro bloqueado de Amine Adli cayó en manos de Azmoun, quien dobló el balón pero observó desesperado cómo su tiro se fue desviado. Al final, la gestión del tiempo que muchos asocian con los equipos de José Mourinho fue suficiente para que la Roma cruzara la línea de meta.
A pesar del empate, el Leverkusen de Xabi Alonso cae eliminado por 1-0 en el global, mientras que la Roma avanza a la final de Budapest el 31 de mayo.